Si hay algo que no me gusta e intento evitar siempre es perder el tiempo. Ya he comentado alguna vez que la vida es una, corta y se pasa muy rápido. Por eso no podemos estar permanentemente perdiendo el tiempo.
Llevo casi toda mi vida viviendo en Madrid, una ciudad que moverse en coche a ciertas horas implica estar demasiado tiempo atascado. Y diría que en los últimos años, ya no es solo a ciertas horas, da igual cuando te muevas que siempre acabas metido en un atasco.
Pasé muchos años teniendo que aguantar atascos de 1 hora para ir a trabajar y otra hora para volver de trabajar. ¡Son 2 horas de atasco al día! Una completa absoluta pérdida de tiempo.
Finalmente decidí que no podía seguir así, y me compré una moto. ¡que gran acierto! No solo por lo que disfruto de ir en moto (siempre fui un gran fan de las motos), sino que lo que antes era 1 hora ahora se convierte en 15 minutos. Lo que antes eran vueltas y vueltas para aparcar ahora puedo aparcar en la puerta sin perder ni un minuto.
Y otra de las cosas que más nos hace perder el tiempo hoy en día son las redes sociales. Es increíble la cantidad de tiempo perdido mirando contenido que nos aporta absolutamente nada. Horas y horas al día improductivas que nunca volverán. Intento limitar el uso del móvil a 1h al día. Creo que teniendo en cuenta que es un elemento de comunicación con familiares, amigos y compañeros del trabajo es un buen límite.
Te recomiendo que habilites la función del móvil que te mide el tiempo de uso, que apliques límites de uso de las aplicaciones y evitar perder el tiempo. Recuerda que ese tiempo perdido nunca volverá.
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