Seguro que muchas veces te has imaginado que tu vida sería mejor o serías más feliz si ganaras X cantidad de dinero, o si vivieses en otro lugar o si algo relevante en tu vida fuese diferente.
Tendemos a idealizar cómo sería nuestra vida si algunas cosas cambiasen. Creemos que esos cambios son la clave para tener la vida que soñamos.
Pero la realidad suele ser muy diferente a lo que habíamos imaginado. Por ejemplo, consigues el trabajo que soñabas y al poco tiempo te das cuenta de que no es lo que tenias en tu cabeza antes de conseguirlo. Puede ser incluso peor que antes.
Muchos de estos cambios los asociamos a cosas materiales. Se piensa que cuando tengas el último iPhone va a ser la leche, y cuando lo tienes te das cuenta que nada ha cambiado. Bueno si, tienes bastante menos dinero en tu cuenta. Lo mismo ocurre con ropa, coches y otros artículos. Si, da un poco de alegría cuando lo consigues, pero después ves que tu vida no es como la imaginabas cuando no lo tenías.
Pero no me quiero centrar en bienes materiales, me quiero centrar en otros aspectos de tu vida. ¿Y si me mudase a vivir a la playa? Seguro que alguna vez te lo has preguntado. Yo infinitas veces. Y más viendo lo que cuesta en Madrid las casas y lo que cuestan en otros sitios. Además yo trabajo online y podría vivir donde quisiera.
Y es que tengo asociado a vivir en la playa a lo feliz que me hace cuando la disfruto en vacaciones. Pero es diferente que vivir allí. Irme a vivir a otro lado significa dejar atrás a amigos y familia. Y no creas que me asusta, ya lo hice antes y lo podría volver a hacer. Pero la verdad es que creo que, aunque algunas cosas las disfrutaría, mi vida allí no sería como me imagino en mi cabeza.
¿Cómo podría ser más feliz alejando de amigos y familia si lo que más feliz me hace es pasar tiempo con amigos y familia? Pues en mi cabeza suena a vida de ensueño eso de irme a vivir a la playa.
Y no pasa solo con eso. También me pasa mucho con la idea de tener mucho tiempo libre para mi. Me imagino un sinfín de actividades divertidas y emocionantes. Pero luego cuando tengo semanas de poco trabajo y tiempo libre me veo que para nada es como me imaginaba cuando no tenía todo ese tiempo.
Con esto no quiero decir que no luches por cambiar las cosas que no te gustan de tu vida ni luchar por tus ilusiones. Claro que hay que hacerlo. Lo que pretendo decir es que las cosas hay que pensarlas bien, dedicándole tiempo, sin dejarnos llevar por lo que vemos en redes sociales o las fantasías de nuestra cabeza.
Piensa en qué cosas cambiarían de verdad, cómo impactaría en tu vida y a que tienes que renunciar para ello. En la vida seguro que no necesitamos mucho más de lo que ya tenemos. No te montes tantas películas. No es como imaginabas.
Online Marketer, blogger, filmaker, entrepeneur, and travel-lover can define me perfectly. Read my thoughts and follow my lifestyle