Pequeños hábitos pueden cambiar tu vida

El ser humano es un animal que acostumbra  a adquirir hábitos, ya sean bueno o malos. Dicen que si realizas algún tipo de acción durante 21 días seguidos nuestro cuerpo lo asume como un hábito más. 

Sobre esa base de los 21 días es sobre lo que me quiero basar a continuación. Cuando queremos cambiar aspectos de nuestra vida y tomar hábitos buenos es normal que queramos tomar cambios muy radicales y brusco que no nos permitan cumplir esos 21 días para convertirlo en un nuevo habito.

De la misma manera que en un capitulo anterior hablaba que para conseguir un gran objetivo debemos dividirlo en pequeños objetivos que nos vayan permitiendo avanzar con los hábitos debemos aplicar una estrategia similar.

Si queremos hacer ejercicio todos los días, es probable que no aguantes un tirón de 21 días seguidos realizando 1 hora de ejercicio.  Seguro que antes de los 21 días has fallado, acabamos dejando días entre medias, y poco a poco irás dejándolo hasta que volverás a no realizar ejercicio con normalidad. 

Lo que quiero que comprendas es que es mucho más fácil si nos fijamos pequeños hábitos que más adelante podremos ampliar. Es decir, en el mismo ejemplo anterior, en lugar de plantearte realizar 1 hora de ejercicio durante todos los días, empieza por hacer sólo 7 minutos de ejercicio durante todos los días. Siendo sólo 7 minutos es mucho más fácil de que alcances los 21 días seguidos y lo conviertas en un hábito.

A partir de ese momento, ya estarás en disposición de en lugar de realizar 7 minutos ampliarlo a 15 minutos todos los días. Es un pequeño esfuerzo extra que seguro que volverás a cumplir durante los siguientes días y mejorar tu hábito. Así, hasta alcanzar la hora diaria que deseas cumplir.

Te pongo el ejemplo del ejercicio pero es aplicable a cualquier otro hábito. Si lo que deseas es meditar a diario, empieza por 5 minutos al día. Si al contrario deseas cambiar un hábito como fumar, empieza por reducir el numero de cigarrillos diarios. Cuando te acostumbres a fumar menos, vuelve a reducirlo, y así hasta que consigas dejarlo.

Si te das cuenta, son los pequeños hábitos los que no suponen un gran esfuerzo pero nos abren la puerta a implementar grandes cambios en nuestra vida. 

Asi que te animo a hacer un listado con los hábitos que deseas implementar en tu vida y junto a cada uno de esos hábitos escribir cual puede ser el pequeño hábito por el que empezar. Así podrás comprobar que los pequeños hábitos pueden cambiar tu vida.

Responder a Anónimo Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *